Cómo crear una cultura para el aprendizaje

Publicado el 6 noviembre, 2020 por Rodrigo Ricardo

¿Qué es una cultura para aprender?

El objetivo de la enseñanza es impartir conocimientos y habilidades; es un regalo increíble que todos deberíamos tener la oportunidad de recibir. Pero solo te lleva hasta cierto punto. Si, por otro lado, puede darles a sus estudiantes el amor por el aprendizaje y las herramientas necesarias para aprender más ellos mismos, es un regalo que sigue dando. Es como enseñar a pescar a un hombre, mucho más útil de lo que nunca será un solo pez. ¿Pero cómo haces eso?

Una gran parte es aprender a desarrollar una cultura de aprendizaje. Si podemos crear comunidades de aula que contengan esta cultura, nuestros estudiantes tendrán mucho éxito. Una cultura para el aprendizaje es cualquier cultura del aula donde la atmósfera fomenta el aprendizaje y les da a los estudiantes la propiedad del proceso. Una cultura para el aprendizaje no es un salón de clases donde los estudiantes simplemente escuchan al maestro y hacen su trabajo. Una verdadera cultura para el aprendizaje es aquella en la que los estudiantes están a cargo de su propio aprendizaje y se empujan y motivan activamente a sí mismos y a sus compañeros de clase.

En esta lección, vamos a discutir cómo crear tal cultura y cómo se ve.

¿Cómo es una cultura para el aprendizaje?

No existe una fórmula o imagen única de cómo se ve una cultura para el aprendizaje, pero hay algunas características que son bastante comunes. En un aula de este tipo, los estudiantes y los profesores tienden a interactuar de manera constructiva y colegiada; se trata más de una colaboración que de que el profesor esté simplemente a cargo. En tal aula, el trabajo duro y la perseverancia son valorados y recompensados ​​por profesores y compañeros de estudios. En un salón de clases así, los estudiantes eligen aprender porque comprenden el valor de lo que están aprendiendo. Y en un salón de clases así, los estudiantes trabajan juntos y se ayudan unos a otros a alcanzar sus metas de aprendizaje. Es posible que vea a los estudiantes colaborando en proyectos, ayudándose entre sí a través de problemas, investigando temas en línea y verificando su progreso con un maestro. Una cultura de aprendizaje ayuda a los estudiantes a abordar la educación de una manera madura y activa.


Una cultura de aprendizaje lleva a que los estudiantes se enseñen a sí mismos y a los demás
cultura del aprendizaje

Creando una cultura para el aprendizaje

Es difícil explicar cómo crear una cultura de aprendizaje. Gran parte es una cuestión de tono y de la forma en que te expresas con tus estudiantes, no es solo una lista de pasos tangibles. Pero hay ciertas cosas que pueden ayudar.

Es vital enfatizar el trabajo y las actividades que les dan a los estudiantes la propiedad de su aprendizaje. Esto puede involucrar la resolución de problemas en grupo, discusiones en clase dirigidas por estudiantes, proyectos de investigación y evaluaciones donde los estudiantes eligen cuando están listos para completarlos. Puede configurar una clase de tal manera que la clase en sí sea más un taller para obtener ayuda y apoyo, en lugar de un lugar para dar una conferencia e insertar conocimientos en los estudiantes.

Pero más allá de los sistemas reales que les dan propiedad a los estudiantes, también se trata de las cosas que les dice a los estudiantes y la forma en que las dice. Es vital dejar en claro a los estudiantes por qué lo que están aprendiendo es importante: necesitan sentir que sacarán algo de ello. Idealmente, esto debería ser más que una buena calificación. Ser capaz de inspirar a sus estudiantes a que se preocupen por su aprendizaje es la parte más desafiante de crear tal cultura para el aprendizaje, y es realmente una cuestión de práctica.

Hay muchas pequeñas cosas que puede hacer para ayudar a crear una cultura de aprendizaje. Un entorno donde los errores se valoran y nunca se menosprecian, donde se anima a los estudiantes a compartir sus pensamientos incluso si están totalmente equivocados, y donde la colaboración se fomenta y recompensa por sí misma es el objetivo. Cuando protege la comunidad de su salón de clases hasta el punto de que se convierte en un espacio seguro donde los estudiantes pueden tomar riesgos con mayor comodidad, gran parte de la batalla ya está ganada. Muy pronto los estudiantes colaborarán tanto que en lugar de tener un maestro, tendrás una clase llena de ellos. Y con una clase llena de profesores, a los estudiantes les resulta difícil no aprender.

Resumen de la lección

Una cultura para el aprendizaje es un entorno de aula donde los estudiantes aprenden orgánicamente y se involucran en el proceso. Es un entorno de colaboración, donde el docente facilita la búsqueda de conocimientos del alumno. Lograr una verdadera cultura del aprendizaje puede ser un desafío, pero es posible si se toman las medidas adecuadas.

La creación de una cultura para el aprendizaje es una combinación de actividades y estructura en el aula, que anima a los estudiantes a tomar posesión y tono. Las actividades que se basan en grupos, implican investigación y aprendizaje independiente, y las evaluaciones flexibles tienden a ayudar a crear una cultura de aprendizaje. Ayudar a los estudiantes a entender por qué es importante su aprendizaje e inspirar a los estudiantes también son parte de la receta. Y el tono de la conversación en el aula es de vital importancia: los estudiantes deben sentir que se encuentran en un entorno seguro en el que pueden probar cosas y cometer errores. Esto implica no solo cómo los profesores interactúan con ellos, sino también la forma en que los estudiantes interactúan entre sí. Crear una cultura para el aprendizaje es un desafío, pero vale la pena el esfuerzo.

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