La Aparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1987: Orígenes y Contexto Histórico

Los Antecedentes del EZLN

El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) emergió públicamente el 1 de enero de 1994, pero sus orígenes se remontan a años previos, específicamente a 1987, cuando un grupo de guerrilleros urbanos y rurales comenzó a organizarse en las selvas de Chiapas. Este movimiento, inspirado en el legado del revolucionario Emiliano Zapata, surgió como respuesta a siglos de opresión, marginación y explotación de las comunidades indígenas en México. La década de 1980 fue un período de crisis económica y política en el país, marcado por la implementación de políticas neoliberales que profundizaron las desigualdades sociales. En este contexto, un pequeño núcleo de activistas, entre ellos mestizos e indígenas, comenzó a gestar lo que más tarde se convertiría en una de las rebeliones más emblemáticas de América Latina.

La formación del EZLN no fue un evento aislado, sino el resultado de un largo proceso de resistencia indígena que se remonta a la época colonial. Las comunidades mayas de Chiapas habían sufrido históricamente el despojo de sus tierras, la explotación laboral en fincas cafetaleras y la exclusión política. A esto se sumó la llegada de guerrilleros provenientes de organizaciones de izquierda, como las Fuerzas de Liberación Nacional (FLN), quienes aportaron estructura militar e ideológica al movimiento. La fusión entre la cosmovisión indígena y las ideas marxistas permitió la creación de un ejército insurgente único, que no solo buscaba la toma del poder, sino la construcción de un sistema autónomo basado en la democracia directa y la justicia social.

El Contexto Político y Social de México en los Años 80

La década de 1980 fue un período de transformaciones profundas en México, caracterizado por la crisis económica, el autoritarismo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el surgimiento de movimientos sociales que demandaban democracia y derechos sociales. En 1982, el país enfrentó una severa deuda externa que llevó al gobierno de Miguel de la Madrid a implementar medidas de austeridad y privatizaciones, afectando especialmente a los sectores más pobres. Estas políticas neoliberales generaron descontento en amplios sectores de la población, incluyendo a campesinos, obreros y estudiantes, que veían cómo el Estado abandonaba su papel social.

En Chiapas, la situación era aún más crítica. A pesar de ser un estado rico en recursos naturales, la mayoría de su población vivía en condiciones de extrema pobreza. Las comunidades indígenas sufrían discriminación racial, falta de acceso a servicios básicos y represión por parte de caciques locales y el gobierno estatal. Fue en este escenario donde comenzaron a llegar militantes de las FLN, quienes establecieron contacto con líderes indígenas y empezaron a construir una red clandestina de apoyo. La selva Lacandona, una región de difícil acceso, se convirtió en el refugio ideal para el entrenamiento guerrillero. A diferencia de otros movimientos armados en Latinoamérica, el EZLN no buscaba imponer una ideología externa, sino articular las demandas históricas de los pueblos originarios con una estrategia de lucha revolucionaria.

1987: El Año Clave en la Formación del EZLN

Aunque el EZLN se dio a conocer en 1994, fue en 1987 cuando se consolidó su estructura militar y política. Durante ese año, un grupo de insurgentes, entre los que destacaba el subcomandante Marcos (posteriormente conocido como Subcomandante Galeano), se adentró en la selva chiapaneca para establecer los primeros campamentos guerrilleros. Este proceso no fue fácil, ya que los militantes urbanos tuvieron que adaptarse a las condiciones extremas de la jungla y ganarse la confianza de las comunidades indígenas, quienes inicialmente desconfiaban de los forasteros. Sin embargo, con el tiempo, los zapatistas lograron integrarse a la vida comunitaria, aprendiendo lenguas como el tzotzil y el tzeltal, y comprendiendo las necesidades específicas de los pueblos originarios.

Uno de los hitos más importantes de 1987 fue la realización de asambleas secretas en las que se definieron los principios del EZLN. A diferencia de otras guerrillas, los zapatistas decidieron que su lucha no sería por el poder estatal, sino por la autonomía de las comunidades indígenas. Este enfoque anticapitalista y antineoliberal se plasmó en documentos internos que más tarde se convertirían en la base de su Declaración de la Selva Lacandona. Además, se estableció una estructura militar horizontal, donde las decisiones se tomaban colectivamente, reflejando las tradiciones asamblearias de los pueblos mayas. Este modelo organizativo fue fundamental para el crecimiento del movimiento, ya que permitió la participación activa de hombres, mujeres y jóvenes en la resistencia armada y política.

Conclusión: El Legado del EZLN y su Impacto en la Lucha Social

La aparición del EZLN en 1987 marcó el inicio de un movimiento que cambiaría la historia de México y se convertiría en un referente internacional de resistencia indígena y anticapitalista. Aunque su alzamiento público ocurrió en 1994, los años previos de organización clandestina fueron cruciales para construir una fuerza insurgente arraigada en las demandas populares. Hoy, el zapatismo sigue siendo un símbolo de lucha por la autonomía, la justicia social y la defensa de los derechos de los pueblos originarios. Su legado perdura no solo en Chiapas, sino en movimientos sociales alrededor del mundo que buscan alternativas al sistema neoliberal.