¿Cómo afecta la presencia de impurezas al punto de ebullición de un líquido?

Publicado el 7 junio, 2025 por Rodrigo Ricardo

El punto de ebullición es una propiedad física fundamental que define la temperatura a la cual un líquido se transforma en vapor. Este fenómeno ocurre cuando la presión de vapor del líquido iguala a la presión atmosférica circundante. Sin embargo, la presencia de impurezas en un líquido puede alterar significativamente su punto de ebullición, un principio ampliamente estudiado en química y física. Comprender este efecto es esencial en aplicaciones industriales, farmacéuticas y de laboratorio, donde la pureza de las sustancias influye directamente en los resultados.

Cuando un líquido contiene impurezas disueltas, como sales, minerales u otros compuestos, sus propiedades coligativas—aquellas que dependen del número de partículas en solución y no de su naturaleza—se modifican. En particular, el punto de ebullición experimenta un aumento conocido como elevación ebulloscópica. Este incremento puede ser calculado mediante ecuaciones termodinámicas, como la ley de Raoult y la ecuación de Clausius-Clapeyron, que relacionan la composición de la solución con su comportamiento térmico.

En este artículo, exploraremos en profundidad cómo las impurezas afectan el punto de ebullición, los fundamentos teóricos detrás de este fenómeno, y sus implicaciones prácticas en diferentes campos científicos e industriales. Además, analizaremos ejemplos concretos, como el efecto de la sal en el agua y su aplicación en procesos de destilación.


Fundamentos del Punto de Ebullición y su Relación con las Impurezas

El punto de ebullición de un líquido puro está determinado por la estructura molecular y las fuerzas intermoleculares que mantienen unidas sus partículas. Por ejemplo, el agua hierve a 100 °C a nivel del mar debido a los enlaces de hidrógeno que requieren cierta energía térmica para romperse. Sin embargo, cuando se añaden solutos no volátiles—es decir, sustancias que no se evaporan fácilmente—el equilibrio dinámico entre las fases líquida y gaseosa se altera.

Las impurezas disueltas reducen la tendencia de las moléculas del solvente a escapar hacia la fase gaseosa, lo que significa que se necesita mayor energía (y por lo tanto, una temperatura más alta) para alcanzar la presión de vapor necesaria que iguale a la presión atmosférica. Este principio es descrito por la ley de Raoult, que establece que la presión de vapor de un solvente en una solución es proporcional a su fracción molar. Matemáticamente, se expresa como:

[ {eq}P_{\text{solución}} = X_{\text{solvente}} \cdot P_{\text{solvente puro}}{/eq} ]

Donde ( {eq}X_{\text{solvente}}{/eq} ) es la fracción molar del solvente y ( {eq}P_{\text{solvente puro}}{/eq} ) es su presión de vapor en estado puro. Al disminuir ( {eq}X_{\text{solvente}}{/eq} ) debido a la presencia de solutos, la presión de vapor de la solución disminuye, requiriendo un aumento de temperatura para compensar este efecto.

Además, la ecuación de Clausius-Clapeyron permite predecir cómo cambia el punto de ebullición con la presión externa, pero en soluciones, la presencia de impurezas introduce un factor adicional: la molalidad del soluto. Cuanto mayor sea la concentración de partículas disueltas, más significativo será el aumento en el punto de ebullición.


Elevación Ebulloscópica: Cálculo y Factores Determinantes

La elevación ebulloscópica ({eq}( \Delta T_b ){/eq}) es el incremento en el punto de ebullición causado por la adición de un soluto no volátil. Este fenómeno puede cuantificarse mediante la siguiente ecuación:

[ {eq}\Delta T_b = K_b \cdot m \cdot i{/eq} ]

Donde:

  • ( {eq}K_b{/eq} ) es la constante ebulloscópica del solvente (para el agua, ( {eq}K_b = 0.512 \, \text{°C·kg/mol} ){/eq}).
  • ( m ) es la molalidad del soluto (moles de soluto por kilogramo de solvente).
  • ( i ) es el factor de van’t Hoff, que indica el número de partículas en las que se disocia el soluto (por ejemplo, ( NaCl ) se disocia en ( Na^+ ) y ( Cl^- ), por lo que ( i \approx 2 )).

Un ejemplo práctico es la adición de sal común (( NaCl )) al agua. Si disolvemos 58.5 g de NaCl (1 mol) en 1 kg de agua, la molalidad es 1 mol/kg. Dado que el ( NaCl ) se disocia en dos iones, ( i = 2 ). Por lo tanto, el aumento en el punto de ebullición sería:

[ {eq}\Delta T_b = 0.512 \, \text{°C·kg/mol} \times 1 \, \text{mol/kg} \times 2 = 1.024 \, \text{°C}{/eq} ]

Así, el agua salada herviría a 101.024 °C en lugar de 100 °C. Este efecto es ampliamente utilizado en la cocina, donde añadir sal al agua reduce el tiempo de cocción de los alimentos al aumentar ligeramente la temperatura de ebullición.


Aplicaciones Prácticas en la Industria y la Ciencia

El conocimiento de cómo las impurezas afectan el punto de ebullición tiene numerosas aplicaciones. En la industria química, los procesos de destilación dependen de la separación de componentes basada en sus puntos de ebullición. Si una mezcla contiene impurezas, los ingenieros deben ajustar las temperaturas de operación para garantizar una purificación eficiente.

En la farmacéutica, la estabilidad de los medicamentos líquidos puede verse comprometida si hay contaminantes que alteren su punto de ebullición, afectando su conservación y dosificación. Además, en la criogenia, el uso de soluciones anticongelantes en vehículos se basa en principios similares: los solutos disminuyen el punto de congelación y aumentan el punto de ebullición del agua, protegiendo los motores en condiciones extremas.


Conclusión

La presencia de impurezas en un líquido modifica su punto de ebullición debido a efectos coligativos, particularmente la elevación ebulloscópica. Este fenómeno tiene implicaciones cruciales en campos que van desde la gastronomía hasta la ingeniería química. Comprender estos principios permite optimizar procesos industriales, mejorar técnicas de purificación y diseñar materiales con propiedades térmicas controladas.

En resumen, el estudio del punto de ebullición en soluciones no solo es fundamental en la química teórica, sino que también tiene aplicaciones prácticas que impactan nuestra vida cotidiana.

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