Factores en la identificación errónea de estudiantes con discapacidades

Identificación para Educación Especial

Kyle es un estudiante de cuarto grado con una discapacidad de aprendizaje. Cuando Kyle estaba en el jardín de infantes, su maestra, la Sra. Hope, notó que tenía problemas para aprender a leer y escribir. Luchó en grupos y trabajando uno a uno. La señora Hope se reunió con los padres de Kyle para discutir sus preocupaciones. Admitieron que Kyle siempre había parecido un poco atrasado en su desarrollo. Después de acercarse al equipo de intervención con datos específicos sobre el desempeño académico de Kyle, la Sra. Hope regresó a su clase con algunas ideas sobre cómo ayudar a Kyle a ponerse al día. Implementó intervenciones específicas y mantuvo datos sobre el progreso de Kyle, pero las intervenciones no marcaron la diferencia.

En ese momento, Kyle fue remitido a educación especial, donde completó muchos tipos diferentes de evaluaciones formales e informales. El psicólogo de la escuela determinó que, basándose en los datos de su clase, las observaciones y los resultados de las pruebas, Kyle tenía una discapacidad de aprendizaje. En los años siguientes, Kyle recibió instrucción individualizada de educadores especiales que ayudaron a refinar las brechas de habilidades específicas que estaban creando barreras para Kyle. Ahora, como estudiante de cuarto grado, Kyle puede mantenerse al día con el plan de estudios regular junto con sus compañeros típicos, al mismo tiempo que recibe algunas adaptaciones e instrucción individualizada para ayudarlo a enfrentar los desafíos de su discapacidad de aprendizaje.

Este ejemplo describe la forma en que se supone que funciona la identificación para la educación especial. El proceso incluye un equipo de profesionales, varios periodos de recogida de datos, intervenciones y un sinfín de pruebas. Sin embargo, hay muchos casos en los que las escuelas identifican erróneamente a los estudiantes y los colocan en entornos de educación especial cuando en realidad no tienen una discapacidad.

Identificación errónea de estudiantes con discapacidades

Las investigaciones indican que existe una población de estudiantes que son identificados erróneamente como discapacitados. Si bien los educadores generales y especiales están capacitados en sus programas universitarios para seguir procedimientos específicos al evaluar a los niños, todavía existe un elemento de disparidad en las pruebas precisas. La discapacidad sobrediagnosticada más común es la discapacidad específica del aprendizaje. Analicemos algunos de los factores que conducen a una colocación incorrecta.

Estado socioeconómico bajo

El término estatus socioeconómico (SES) se refiere a la posición social o grupo social de un individuo y su familia. Al medir el NSE, normalmente nos fijamos en los ingresos, las ocupaciones y la educación de la familia. Los niños de familias de bajo nivel socioeconómico tienen más probabilidades de ser identificados con una discapacidad. Esto puede suceder por varias razones. Los niños de familias pobres tienden a vivir en entornos más estresantes y menos enriquecidos en alfabetización. Esto significa que es posible que no comiencen sus años escolares con una ética de trabajo saludable, comportamientos apropiados y un vocabulario extenso. Dado que estos niños comienzan en un nivel más bajo que sus compañeros, es posible que sigan quedándose atrás. Los educadores y psicólogos escolares pueden confundir el retraso académico con una discapacidad de aprendizaje.

Otro aspecto del bajo nivel socioeconómico como factor de identificación errónea tiene que ver con la comunidad escolar en general. Las escuelas de los barrios pobres suelen carecer de los materiales, el plan de estudios y la formación docente de calidad para funcionar con éxito. Los niños pueden ser diagnosticados erróneamente por falta de comprensión o de tiempo por parte de los educadores.

Falta de dominio del inglés

Los estudiantes de idioma inglés (ELL) son la población de estudiantes que no dominan el idioma inglés. No comprender o hablar inglés sería una barrera importante para asistir a la escuela en los EE. UU. Si bien los maestros toman en cuenta las preferencias del idioma nativo al realizar las pruebas, esta población de niños todavía está sobreidentificada como con una discapacidad de aprendizaje. Una discapacidad real no está determinada por factores externos, como el idioma del aula. Más bien, una discapacidad es el resultado de eventos intrínsecos o falta de desarrollo que ocurre en el cerebro y el cuerpo. Los estudiantes ELL tienden a obtener malas calificaciones en las evaluaciones, incluso en su lengua materna, lo que conduce a una colocación inexacta.

Resumen de la lección

La educación especial es la práctica de educar a estudiantes con discapacidades en un ambiente de escuela pública. Idealmente, el proceso de identificación de estudiantes con discapacidades incluye un equipo de educadores calificados, múltiples evaluaciones, intervenciones y una recopilación exhaustiva de datos. A pesar de la configuración del sistema para la identificación, muchos niños son diagnosticados erróneamente y colocados en educación especial cuando no tienen una discapacidad. Factores como el bajo nivel socioeconómico y la falta de dominio del inglés que normalmente se observa en la población de estudiantes de inglés contribuyen a esta identificación errónea.