Fase Proliferativa del Ciclo Menstrual: Descripción general y definición

Publicado el 20 junio, 2024 por Rodrigo Ricardo

Revisión del ciclo uterino

El ciclo uterino, también conocido como ciclo menstrual, implica cambios que ocurren en el revestimiento endometrial o endometrio del útero. El endometrio es una membrana mucosa rica en nutrientes que se espesa en cada ciclo en preparación para un posible embarazo. El endometrio juega un papel vital para soportar un posible embrión en desarrollo, para que pueda llegar a término. El ciclo uterino controla el endometrio para recibir un óvulo potencial fertilizado para que pueda proporcionar alimento al embrión en desarrollo. Hay tres fases en el ciclo uterino que son: la menstruación, la fase proliferativa y la fase secretora. Estas fases tienen lugar cada 21-35 días (28 días en promedio) en las mujeres.

En la fase de menstruación, el endometrio construido a partir del mes anterior se desprende si la mujer no queda embarazada. Esta fase también se conoce como menstruación. Dura de 1 a 5 días en la mayoría de las mujeres. La segunda fase, la fase proliferativa, es cuando el endometrio se reconstruye debido a un aumento de la hormona estrógeno. El estrógeno se libera cuando madura un folículo, un saco lleno de líquido que alberga un óvulo. Las mujeres comienzan la pubertad con alrededor de 300.000 a 400.000 folículos que disminuyen a medida que la mujer envejece debido a la liberación de óvulos en cada ciclo. La fase final, la fase secretora, es cuando el endometrio se vuelve receptivo a la implantación del óvulo debido a un aumento de la hormona progesterona. Esta fase comienza con la ovulación, etapa en la que se libera un óvulo. Durante esta fase, el cuerpo lúteo libera progesterona. El cuerpo lúteo es un cuerpo amarillento que secreta hormonas en el ovario y promueve un aumento del flujo sanguíneo y de las secreciones uterinas en el endometrio.

Esta lección se centrará en la segunda fase, la fase proliferativa del ciclo menstrual.

Zonas endometriales

El endometrio, o revestimiento endometrial del útero, se compone de dos zonas: la zona funcional y la zona basilar. La zona basilar está adyacente al miometrio. El miometrio es la pared muscular lisa del útero que ayuda en el parto y el parto. Se contrae para ayudar a mover el feto desde el útero hacia la vagina para el nacimiento. La zona basilar permanece intacta durante todo el ciclo. Sin embargo, la zona funcional se desprende durante la menstruación y se regenera en la parte superior de la zona basilar durante la fase proliferativa. La fase proliferativa es el momento durante el ciclo menstrual en el que las células endometriales se multiplican y diseminan, lo que representa un endometrio en fase proliferativa. Durante la ovulación, o cuando se libera un óvulo para una posible fertilización, la zona funcional tiene varios milímetros de espesor y está muy vascularizada con un aumento significativo de arterias y venas. Esto es hacia el final de la fase proliferativa.

Comprender la fase proliferativa

En la etapa proliferativa, un aumento de la hormona estrógeno es lo que provoca que se reconstruya la zona funcional. El estrógeno se produce a partir del crecimiento folicular dentro de los ovarios. Un folículo ovárico es el alojamiento de un óvulo. A medida que un folículo se desarrolla y madura en preparación para la liberación de ese óvulo, libera estrógeno, específicamente estradiol. Este estrógeno viaja al útero. El estrógeno es responsable de promover el nuevo crecimiento de los tejidos, una mayor vascularización, un aumento de la mucosidad y un mayor crecimiento y multiplicación de las glándulas uterinas para la zona funcional.

Luego, la fase proliferativa comienza con la multiplicación de las glándulas uterinas dentro de la zona basilar. Estas glándulas desempeñan un papel clave al contribuir al aumento del espesor de la zona funcional. Luego, las arterias de la zona basilar crecen hacia la zona funcional para proporcionar nutrición y suministro de sangre. La zona funcional se vuelve entonces muy vascularizada y se espesa. Las glándulas uterinas dentro del tejido provocan un engrosamiento de la zona funcional porque las glándulas crecen, se enrollan y secretan un moco rico en glucógeno a través del espesor del endometrio hasta la zona basilar. El glucógeno, que almacena el azúcar glucosa, es una buena fuente de energía en caso de que un óvulo fertilizado se implante en el útero. Esto es importante ya que la zona funcional es donde estará el embrión en desarrollo. La zona funcional proporciona alimento y protección al feto en crecimiento, especialmente durante las primeras etapas de desarrollo, lo que ayuda al feto a llegar a término.

Resumen de la lección

Existen tres fases en el ciclo uterino, o ciclo menstrual, que son: la menstruación, la fase proliferativa y la fase secretora. La fase proliferativa, la segunda fase del ciclo uterino, implica cambios que ocurren en el revestimiento endometrial, o endometrio, del útero. En la fase proliferativa, la hormona estrógeno producida a partir del crecimiento folicular viaja al útero para estimular el nuevo crecimiento del tejido, una mayor vascularización (un aumento de arterias y venas), un aumento de la mucosidad y un mayor crecimiento y multiplicación de las glándulas uterinas para una zona específica del endometrio llamada la zona funcional. En la fase secretora, la fase final, se produce un aumento de la hormona progesterona que hace que el endometrio se vuelva receptivo a la implantación del óvulo.

La zona funcional y la zona basilar son dos zonas del endometrio. La zona basilar permanece intacta durante el ciclo uterino. La zona funcional, por otro lado, es la que se elimina durante la menstruación y se reconstruye durante la fase proliferativa. El tejido de la zona funcional del endometrio debe eliminarse antes de que pueda comenzar la fase proliferativa, ya que implica la reconstrucción de este tejido. Esta reconstrucción del tejido es esencial para que el endometrio reciba un potencial óvulo fertilizado. La reconstrucción o proliferación del tejido proporciona el alimento y el apoyo necesarios al embrión en desarrollo, para que pueda llegar a término.

Articulos relacionados