Perspectiva atmosférica y aérea en el Arte: Definición y ejemplos

¿Qué es la perspectiva atmosférica en el arte?

Los artistas utilizan muchas formas de perspectiva para crear la ilusión de profundidad en una superficie plana. Existe la perspectiva tradicional, donde los objetos que están más lejos parecen más pequeños. La perspectiva atmosférica es otra forma más sutil de perspectiva. ¿Qué es la perspectiva atmosférica en el arte? La perspectiva atmosférica crea la impresión de atmósfera entre el espectador y el sujeto. También se le llama vista aérea, es decir, se refiere a la forma en que la atmósfera influye en la forma en que vemos los objetos distantes. A medida que las cosas se alejan, suceden algunas cosas. Primero, parecen más pequeños. En segundo lugar, los objetos pierden detalles y adquieren formas progresivamente más simples y planas. En tercer lugar, la atmósfera a través de la cual el espectador mira para ver un objeto distante influye en el color del objeto.

Si es posible, mire a lo lejos, observe cómo aparecen las montañas o los edificios distantes y compárelo con cómo se verían si los viera de cerca. Tienen menos detalles y van adquiriendo un tono azul cuanto más se alejan (o un color diferente, dependiendo del nivel de contaminación de la zona o incluso de la hora del día). Conocer la definición artística de la perspectiva atmosférica ayuda a comprender este fenómeno y recrearlo en obras de arte.

Tipos de perspectiva en el arte

Como se mencionó anteriormente, existen múltiples tipos de perspectiva en el arte, pero se pueden dividir en dos categorías: perspectiva lineal y perspectiva atmosférica, que se detalla anteriormente.

La perspectiva lineal es cómo las líneas parecen retroceder en la distancia hasta un punto de fuga, así como cómo los objetos distantes parecen hacerse más pequeños debido a que sus líneas se acercan al punto de fuga. Hay tres formas de perspectiva lineal que se utilizan en el arte:

• Perspectiva de un punto: hay un punto de fuga en la línea del horizonte hacia el cual las líneas retrocederán. Las superficies frontales parecen planas, mientras que todos los demás lados visibles de los objetos tienen sus líneas retrocediendo hasta convertirse en un único punto de fuga.
• Perspectiva de dos puntos: hay dos puntos de fuga en la línea del horizonte hacia los cuales las líneas retrocederán. Las líneas en la parte superior e inferior de los objetos retroceden hasta sus respectivos puntos de fuga.
• Perspectiva de tres puntos: hay tres puntos de fuga: dos en la línea del horizonte y uno por encima o por debajo de la línea del horizonte. Las líneas perpendiculares a la línea del horizonte se desvanecen hacia el tercer punto, creando una sensación exagerada de altura.

Historia de la perspectiva aérea en el arte

Los artistas han estado pintando arte en perspectiva atmosférica durante siglos, y uno de los primeros ejemplos se remonta a las antiguas pinturas al fresco grecorromanas. Los artistas griegos y romanos estaban obsesionados con representar figuras, objetos y escenas lo más cerca posible de la realidad en sus frescos y prestaron mucha atención a aspectos como la perspectiva atmosférica. Sin embargo, durante la Edad Media, estas técnicas se perdieron y fueron sustituidas por el arte de estilo bizantino, que representaba escenas o figuras bíblicas en un estilo pictórico.

Durante el siglo XV, los pintores del Renacimiento revivieron estas técnicas. La perspectiva, tanto lineal como atmosférica, ha sido fundamental en el arte desde entonces. Leon Battista Alberti creía que las pinturas debían representar de forma convincente el espacio tridimensional. Escribió un texto teórico titulado Sobre la pintura en 1435, que fue uno de los primeros textos en describir la perspectiva lineal y el propósito de la pintura. Leonardo da Vinci estudió mucho la perspectiva atmosférica e incluso acuñó el término “perspectiva aérea” en su Tratado de pintura para describir este fenómeno, donde “los colores se vuelven más débiles en proporción a su distancia de la persona que los mira”.

El desarrollo de la perspectiva no estaba ocurriendo sólo en los países occidentales. Los pintores chinos también utilizaron la técnica, aunque con un estilo ligeramente diferente. En el siglo XII, el artista Han Cho innovó la técnica de la perspectiva atmosférica en su Shan-shui Ch’un-ch’uan chi, un tratado sobre estilo pictórico. En él, describe tres nuevos tipos de perspectiva, todos relacionados con la perspectiva aérea y cómo las condiciones atmosféricas crean vaguedad y falta de claridad con la distancia.

Elementos de la perspectiva aérea en el arte.

Hay varios elementos clave a considerar al incorporar la perspectiva atmosférica en las obras de arte, como por ejemplo:

• Textura: tanto textura física como representación de textura.
• Valor: El brillo u oscuridad de los colores.
• Claridad: El nivel de detalle que se puede ver en el objeto.
• Saturación: Qué tan ricos son los colores.
• Tono: El color de los objetos.

El dibujo o la pintura en perspectiva atmosférica tienen en cuenta estas cosas al acercar o alejar objetos.

Textura en perspectiva atmosférica

La textura se vuelve menos obvia cuanto más lejos está el objeto. Esto se relaciona con la claridad, ya que cuanto más lejos está algo, más difícil es ver los pequeños detalles. La textura, con respecto a la perspectiva atmosférica, puede relacionarse tanto con la textura física de la obra de arte en sí como con la textura representada de los sujetos de la obra de arte. Por supuesto, estas reglas se pueden romper, ya que muchos artistas utilizan mayores grados de textura física en los fondos para agregar interés visual a un área que de otro modo sería menos interesante.

Valor en perspectiva aérea

Según la perspectiva aérea, cuanto más se aleja un objeto, menor es el contraste entre su valor y el valor del fondo. Esto significa que los objetos más distantes tendrán un valor más cercano al del fondo. El valor se refiere al brillo u oscuridad de los colores, aunque puede ser difícil de detectar. A menudo, los artistas utilizan una escala de grises para medir valores, ya que el valor sin color son simplemente diferentes tonos de gris más claro y más oscuro.

Claridad en la perspectiva atmosférica

En la pintura en perspectiva atmosférica, los objetos que están lejos son menos claros. Esto significa que cualquier detalle que se pueda ver desde más cerca no se puede distinguir desde la distancia. Por ejemplo, es fácil ver las hojas individuales cerca de un árbol. Sin embargo, desde lejos parecen ser un grupo de colores.

Saturación de color

A medida que los objetos se alejan, también pierden saturación. Esto significa que los colores pierden su vitalidad y se vuelven más grises. Este efecto es limitado a menos que el ambiente esté nublado y lluvioso. Por ejemplo, en un día despejado, las montañas pueden parecer menos saturadas pero aún tienen un color, aunque diferente de cómo se verían de cerca.

Cambio de tono

Por último, los objetos adquieren el color de la atmósfera a medida que se alejan. Lo más común es que sea un color azul porque el azul es el color más visible que se refracta en todas las moléculas y partículas de la atmósfera. Sin embargo, en áreas muy contaminadas, la atmósfera puede tener un color más gris o marrón y, como resultado, ese color se transferirá a los objetos lejanos. Durante el amanecer y el atardecer, la atmósfera refracta más luz roja debido a la posición del sol (piense en cómo las nubes se vuelven rojas, naranjas y rosadas durante el amanecer y el atardecer). Como resultado, los objetos distantes también adquirirán ese tono rojizo.

Ejemplos de perspectiva atmosférica en el arte

Albert Bierstadt, pintor del siglo XIX, es un maestro de la perspectiva atmosférica. En su obra Las Montañas Rocosas, el primer plano muestra un campo rico y verde donde los nativos americanos están acampando. Se pueden ver muchos detalles, como la textura de la grava en la esquina inferior izquierda y los árboles en el lado izquierdo. Sin embargo, las montañas distantes tienen formas bastante vagas y solo se pueden ver detalles importantes, como crestas y picos prominentes. La roca, que normalmente parecería de un color tostado o marrón rojizo, se vuelve gris en la distancia debido a la influencia del cambio de tono en la perspectiva atmosférica.

La Mona Lisa de Leonardo da Vinci es sin duda el cuadro más famoso de todos los tiempos. El tema principal de la pintura está representado con increíble detalle, donde se pueden ver incluso mechones individuales de cabello, así como el fino velo que lleva. En el centro, a la izquierda de la figura, se pueden ver colinas de color marrón rojizo con un camino sinuoso, aunque no se pueden distinguir muchos detalles. Al fondo hay más cerros, que serían del mismo color rojizo que los del medio plano, pero la perspectiva atmosférica hace que esos objetos tomen el color de la atmósfera, que en este caso es un tono gris verdoso. Esas montañas lejanas también tienen formas muy vagas, donde se pueden distinguir muy pocos detalles.

Resumen de la lección

La perspectiva atmosférica , también llamada perspectiva aérea, es un tipo de perspectiva en la que los objetos que están más lejos se ven cada vez más afectados visualmente por la atmósfera con el objetivo de crear la ilusión de profundidad en la obra de arte. Hay varias maneras en que esto ocurre:

• Textura: tanto la textura física como la textura renderizada en la pieza.
• Valor: El brillo u oscuridad de los colores.
• Claridad: El nivel de detalle que se puede ver en los objetos.
• Saturación: Qué tan ricos o grises son los colores.
• Tono: El color de los objetos en la obra de arte.

A medida que las cosas se alejan, los detalles que se pueden ver en el objeto se vuelven vagos, lo que reduce la claridad. Los colores también se vuelven menos saturados hasta cierto punto, cambiando hacia tonos más grises. El valor de los colores contrasta menos con el valor del fondo y el color de los objetos adquiere más el color de la atmósfera (más comúnmente azul).

Los artistas han utilizado la perspectiva atmosférica durante siglos, como los artistas grecorromanos que estaban obsesionados con el realismo. Las técnicas se perdieron durante la Edad Media, pero fueron redescubiertas durante el Renacimiento y desde entonces dominadas por muchos artistas, como Leonardo da Vinci y Albert Bierstadt.