¿Qué son los Brotes de Herpes Cóster y cómo se tratan?

Publicado el 30 noviembre, 2024 por Rodrigo Ricardo

Herpes zóster: Causas y tratamiento

El herpes zóster, también conocido como culebrilla, es una enfermedad viral causada por la reactivación del virus varicela-zóster (VZV), el mismo virus que causa la varicela. Después de una infección inicial por varicela, el virus permanece inactivo en los ganglios nerviosos y puede reactivarse años más tarde, causando un brote de herpes zóster. Este brote se caracteriza por una erupción dolorosa y ampollas en la piel que generalmente aparecen en un lado del cuerpo o rostro, siguiendo el recorrido de un nervio.

A continuación, exploramos en detalle qué son los brotes de herpes zóster, sus síntomas, factores de riesgo y opciones de tratamiento.


¿Qué causa el herpes zóster?

El herpes zóster ocurre cuando el virus varicela-zóster se reactiva. Aunque la causa exacta de la reactivación no siempre es clara, existen factores que pueden aumentar el riesgo:

  • Envejecimiento: El riesgo aumenta con la edad, especialmente después de los 50 años.
  • Sistema inmunológico debilitado: Personas con enfermedades como VIH, cáncer o aquellas que toman medicamentos inmunosupresores tienen un mayor riesgo.
  • Estrés: El estrés físico o emocional puede desencadenar la reactivación del virus.
  • Infecciones previas: Haber tenido varicela es un requisito para desarrollar herpes zóster, ya que el virus debe estar presente en el cuerpo.

Síntomas del herpes zóster

Los síntomas del herpes zóster suelen aparecer en etapas y pueden variar en intensidad. Los más comunes incluyen:

1. Dolor y hormigueo inicial

El primer signo suele ser una sensación de dolor, ardor o hormigueo en una parte del cuerpo. Esta sensación puede preceder a la aparición de la erupción por varios días.

2. Erupción cutánea

La erupción comienza como manchas rojas que evolucionan a ampollas llenas de líquido. Estas ampollas suelen aparecer en un patrón lineal en un solo lado del cuerpo, a menudo en el torso o rostro.

3. Picazón y sensibilidad

La piel puede estar extremadamente sensible al tacto y causar picazón intensa.

4. Síntomas generales

Algunas personas experimentan fiebre, dolor de cabeza, fatiga y malestar general antes o durante el brote.


Complicaciones del herpes zóster

El herpes zóster puede causar complicaciones, especialmente si no se trata a tiempo. Las más comunes incluyen:

  • Neuralgia postherpética (NPH): Dolor persistente en el área afectada por el herpes zóster, que puede durar meses o incluso años después de que la erupción desaparece.
  • Infecciones bacterianas: Las ampollas pueden infectarse si no se cuidan adecuadamente.
  • Problemas oculares: Si el herpes zóster afecta el rostro, puede dañar los ojos y causar pérdida de visión.
  • Problemas neurológicos: En casos raros, puede causar inflamación del cerebro (encefalitis) o afectar los nervios motores.

Diagnóstico del herpes zóster

El diagnóstico se basa en los síntomas clínicos y la apariencia de la erupción. En casos donde el diagnóstico no es claro, el médico puede realizar pruebas adicionales, como:

  • Cultivo de vesículas: Se toma una muestra del líquido de las ampollas para identificar el virus.
  • Pruebas de sangre: Pueden detectar anticuerpos contra el virus varicela-zóster.

Tratamiento del herpes zóster

El tratamiento temprano es crucial para reducir la duración del brote y prevenir complicaciones. Las opciones incluyen:

1. Medicamentos antivirales

Los antivirales ayudan a acortar la duración del brote y aliviar los síntomas. Se deben iniciar lo antes posible, preferiblemente dentro de las primeras 72 horas después de la aparición de la erupción.

  • Aciclovir
  • Valaciclovir
  • Famciclovir

2. Analgésicos

El dolor puede ser intenso, por lo que se pueden recetar analgésicos como:

  • Paracetamol o ibuprofeno para el dolor leve.
  • Analgésicos más fuertes o medicamentos específicos para el dolor neuropático, como gabapentina o pregabalina, si el dolor es severo.

3. Cuidado de la piel

  • Mantener la piel limpia y seca: Esto ayuda a prevenir infecciones secundarias.
  • Aplicar compresas frías: Alivia el dolor y la picazón.
  • Cremas tópicas: Cremas con lidocaína o capsaicina pueden aliviar el dolor local.

4. Corticosteroides

En algunos casos, los corticosteroides pueden ser recetados para reducir la inflamación, especialmente si el brote afecta los ojos.


Prevención del herpes zóster

La mejor forma de prevenir el herpes zóster es mediante la vacunación.

1. Vacuna contra el herpes zóster

  • Shingrix: Es una vacuna altamente efectiva recomendada para adultos mayores de 50 años. Ofrece una protección prolongada contra el herpes zóster y la neuralgia postherpética.
  • Zostavax: Una vacuna más antigua, menos utilizada hoy en día debido a la disponibilidad de Shingrix.

2. Estilo de vida saludable

Mantener un sistema inmunológico fuerte puede reducir el riesgo de reactivación del virus:

  • Dieta equilibrada.
  • Ejercicio regular.
  • Manejo del estrés.
  • Descanso adecuado.

Preguntas frecuentes sobre el herpes zóster (FAQ)

1. ¿El herpes zóster es contagioso?

El herpes zóster no se transmite directamente. Sin embargo, una persona con herpes zóster puede transmitir el virus varicela-zóster a alguien que nunca ha tenido varicela, causando varicela en lugar de herpes zóster.

2. ¿Cuánto tiempo dura un brote de herpes zóster?

Un brote suele durar entre 2 y 4 semanas. El dolor puede persistir más tiempo si se desarrolla neuralgia postherpética.

3. ¿Puedo tener herpes zóster más de una vez?

Sí, aunque es poco común, algunas personas pueden experimentar múltiples episodios de herpes zóster.

4. ¿Es recomendable vacunarse si ya he tenido herpes zóster?

Sí, la vacuna se recomienda incluso si has tenido herpes zóster, ya que reduce el riesgo de recurrencia y la gravedad de futuros brotes.

5. ¿Cuándo debo consultar a un médico?

Debes consultar a un médico si experimentas dolor o erupción en un solo lado del cuerpo, especialmente si afecta el rostro o los ojos, o si tienes fiebre y síntomas generales de malestar.


Conclusión

El herpes zóster es una condición dolorosa pero tratable. Reconocer los síntomas y buscar tratamiento temprano es esencial para minimizar el dolor y prevenir complicaciones. La vacunación es la mejor estrategia para reducir el riesgo de brotes, especialmente en adultos mayores. Si experimentas síntomas o tienes preguntas sobre el herpes zóster, consulta a tu médico para recibir el tratamiento adecuado y recomendaciones preventivas.


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Author

Rodrigo Ricardo

Apasionado por compartir conocimientos y ayudar a otros a aprender algo nuevo cada día.

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