Técnicas de motivación y apoyo terapéutico

Ofreciendo apoyo y motivación

La motivación implica reconocer un problema, buscar una forma de cambiar y luego comenzar a solucionar el problema con un plan de cambio. Ciertas intervenciones pueden ser efectivas para motivar a una persona a cambiar, incluidas las técnicas de motivación que inspiran un cambio positivo. Los siguientes son componentes importantes de las técnicas motivacionales:

Escucha activa

La escucha activa incluye ser empático y tener una actitud de apoyo, así como reconocer la resistencia. La resistencia es una forma en que nos protegemos de nuestra propia conciencia de lo que tememos. Es importante que un trabajador social escuche para que pueda entender no solo las palabras, sino también el significado subyacente de lo que dice la persona. Por ejemplo, asentir con la cabeza y decir las palabras “Te escucho” anima a la persona a compartir más sobre sus propios miedos.

Empatía

Ser empático asegura que está escuchando y tratando con el cliente sin juzgarlo. La empatía es la capacidad de reconocer y relacionarse con los pensamientos, sentimientos y emociones del cliente. Es poder ‘ponerse en el lugar’ de otra persona. Por ejemplo, puede imaginar los pensamientos, sentimientos y experiencias de la otra persona como si fueran los suyos.

Empoderamiento y estímulo

El empoderamiento incluye alentar al individuo a hablar, afirmar las preocupaciones del cliente, escuchar y construir una perspectiva positiva para el individuo.

Entrevista motivacional

La entrevista motivacional ayuda al cliente a realizar cambios al respaldar el cambio de una manera que se ajuste a sus propios valores y preocupaciones. En el proceso de la entrevista motivacional , el trabajador social expresa empatía al reflexionar y responder al cliente con retroalimentación directa sobre sus comentarios. Por ejemplo, el trabajador social puede utilizar preguntas abiertas como “¿Qué pasó desde la última vez que nos vimos?” Las preguntas abiertas permiten al cliente compartir más información, en lugar de simplemente responder con un ‘sí’ o un ‘no’ a una pregunta específica.

Técnicas de parcialización

Las técnicas de parcialización permiten al cliente tomar decisiones y lograr el resultado deseado. Esto implica la creación de metas y un plan para tomar las acciones y los pasos apropiados para lograr el resultado deseado. Por ejemplo, se podría pedir al cliente que describa cuál es su objetivo y los pasos necesarios para lograrlo. La parcialización se basa en las fortalezas del cliente durante el proceso terapéutico y de tratamiento. Una vez que el cliente entiende cómo crear metas y tomar decisiones para lograrlas, se convierte en parte de su vida diaria. Esto ayuda al cliente a resolver y gestionar sus propios problemas. Juntos, el trabajador social y el cliente trabajan a través de un proceso que implica evaluar la capacidad del cliente para tomar decisiones y lograr su objetivo.

Un ejemplo:

Cindy es una estudiante universitaria que asiste a terapia y quiere mudarse de la casa de sus padres a su propio apartamento. Está nerviosa y emocionada al mismo tiempo. Juntas, Cindy y su trabajadora social discuten los objetivos de Cindy.

Trabajadora social: ‘¿Cuáles son tus objetivos generales, Cindy?’

Cindy: ‘Quiero ser más independiente’.