Pruebas de susceptibilidad a los antimicrobianos y resistencia a los antibióticos

¿Qué es la resistencia a los antibióticos?

La resistencia a los antibióticos ocurre cuando los microorganismos como las bacterias pueden superar la actividad terapéutica de los medicamentos que están diseñados para matarlos. En otras palabras, se adaptan y se vuelven resistentes, lo que hace que los medicamentos sean ineficaces. La resistencia a los antibióticos es un grave problema de salud pública mundial. Según el Informe de amenazas de resistencia a los antibióticos de 2019 de los CDC, más de 35 000 personas mueren anualmente a causa de ella. Cuando un microorganismo se vuelve resistente a los antibióticos, sobrevive y comienza a propagarse por toda la comunidad. Esto significa que la próxima persona que desarrolle una infección tendrá un recurso menos para un tratamiento exitoso porque el antibiótico que una vez hubiera sido efectivo ya no funciona. Esto sucede porque los microorganismos adaptados tienen ADN alterado que contiene rasgos de resistencia. Estos rasgos se pueden propagar a otros microorganismos que ni siquiera han sido expuestos a ningún tratamiento con antibióticos.

El papel de las pruebas de sensibilidad a los antimicrobianos

Se realiza una prueba de sensibilidad a los antibióticos, o AST, para determinar qué antibiótico será el más efectivo para tratar una infección bacteriana específica. Se puede tomar una muestra para esta prueba de sangre, orina, esputo o incluso de una herida. La prueba AST le dirá al médico qué tipo de microorganismo está causando la infección en cuestión y también qué tipo de antibióticos se deben considerar para el tratamiento. La concentración inhibitoria mínima, o MIC, es uno de los parámetros medidos por una prueba AST y representa la concentración más baja de antibiótico a la que el fluido corporal infectado no puede producir un crecimiento visible de bacterias patógenas después de incubarlo durante la noche.

Técnicas de AST

Aunque la AST es una forma muy útil de determinar qué antibiótico será el más efectivo para tratar una infección, hay algunas circunstancias en las que su uso es inapropiado. Por ejemplo, algunos tipos de patógenos tienen reacciones de susceptibilidad a los antibióticos que ya se conocen, como K. Pneumoniae, que es resistente a la ampicilina. Para esos patógenos, el médico simplemente prescribe un antibiótico diferente.

Dos de las técnicas más comunes para realizar AST incluyen:

• Método de dilución: se realiza una prueba de dilución agregando un poco de antibiótico diluido a un medio de caldo o agar, que es un tipo de azúcar gelatinoso hecho de algas. Luego, se agrega una cantidad estandarizada de la bacteria o patógeno a analizar. Esto se deja durante la noche para la incubación y luego se mide la MIC. Luego, el valor de MIC se compara con las concentraciones del patógeno en el líquido corporal en cuestión para determinar la respuesta clínica probable al antibiótico.
• Prueba de Kirby-Bauer: también llamada prueba de difusión en disco. Para esta prueba, se esparce una suspensión del patógeno sobre un poco de agar en una placa de Petri. Los discos que contienen varias muestras de antibióticos de concentraciones específicas se colocan sobre la superficie del agar. Esto se deja incubar, y luego, se revisa el disco en busca de una zona sin crecimiento para determinar la susceptibilidad a los antibióticos en cuestión. El tamaño real de la zona está relacionado con un valor MIC.

¿Qué significan los resultados de la prueba?

Las pruebas de AST arrojan resultados que se dan en una de estas tres formas:

• Sensible: este resultado significa que el antibiótico probado probablemente sería una buena opción para el tratamiento porque detuvo el crecimiento de la bacteria u otro patógeno que está causando la infección.
• Intermedio: el antibiótico puede funcionar, pero es posible que se necesite una dosis alta.
• Resistente: el antibiótico no es una buena opción porque no detuvo el crecimiento de la bacteria o el patógeno en la prueba.

Algunas de las bacterias más comunes que son resistentes a los antibióticos se denominan patógenos ESKAPE. El acrónimo ESKAPE significa Enterococcus faecium, Staphylococcus aureus, Klebsiella pneumoniae, Acinetobacter baumannii, Pseudomonas aeruginosa y Enterobacter spp. Estos patógenos son muy virulentos y causan la mayoría de las infecciones resistentes a los antibióticos en todo el mundo.