¿Qué es la Inteligencia? Significado y teorías
Definiendo la inteligencia
La definición de inteligencia ha sido debatida durante cientos de años. Con mayor frecuencia se define como la habilidad o capacidad de aprender de situaciones y adaptarse a ellas. Si un individuo se considera inteligente, significa que posee la capacidad mental para comprender conceptos abstractos, aprender de experiencias de primera y segunda mano, adaptarse a diferentes situaciones y, en última instancia, retener y utilizar el conocimiento para manipular los resultados deseados.
Debido al concepto amplio y generalizado de inteligencia, es difícil medirla en una escala única e imparcial. La inteligencia, más bien, es un concepto general que abarca una variedad de aptitudes.
Tipos de inteligencia
Los tres subtipos de inteligencia son la inteligencia humana, la inteligencia artificial (IA) y la vegetal y animal. Dentro de cada uno están las marcas complejas de lo que hace que esa especie o computadora sea capaz de recopilar y retener conocimiento. Mientras que los humanos y los animales necesitan inteligencia general no sólo para sobrevivir sino para prosperar en la Tierra a través de situaciones sociales y emocionales, tanto la IA como la inteligencia vegetal emplean la lógica y el razonamiento para alcanzar el objetivo universal de supervivencia.
Cada tipo de inteligencia tiene un objetivo similar, pero diferente, por lo que medir la calidad del intelecto puede resultar complicado. No se mediría la inteligencia de un pez por su capacidad para trepar a un árbol. Por lo tanto, cada subtipo de inteligencia humana, artificial, vegetal y animal, debe medirse por su capacidad para recopilar, retener y utilizar el conocimiento a su disposición y no tanto por la calidad percibida o la utilidad personal de dicho conocimiento.
Inteligencia humana
Los humanos tienden a separarse del resto del mundo como superiores o diferentes a la naturaleza. Sin embargo, en la mayoría de los casos este no es el caso. La inteligencia humana, al igual que la inteligencia animal, utiliza diferentes niveles para poder sobrevivir, funcionar y tener éxito tanto en la sociedad humana como en la sociedad natural. Según los investigadores, el significado de inteligencia humana es la capacidad de utilizar estímulos ambientales para fomentar las habilidades de resolución de problemas, el razonamiento y el aprendizaje.
Lo que separa la inteligencia humana de la IA o la inteligencia vegetal y animal es el concepto de autorrealización. Tanto la planta/animal como la máquina siguen un patrón similar de inteligencia a través de la conciencia combinada con el instinto subconsciente natural o mecánico. Los humanos, por otro lado, son conscientes de sí mismos y pueden generalizar una situación combinando varios tipos diferentes de conocimiento. En otras palabras, los humanos pueden adaptarse y resolver problemas, incluso cuando no se establece una regla específica. Hay varios subtipos de inteligencia humana, incluida la inteligencia emocional, social, inteligente para los libros y inteligente para la calle. Cada subtipo tiene su propia funcionalidad en la sociedad humana y en el mundo natural.
- Inteligencia emocional: este subtipo de inteligencia se refiere a la capacidad de percibir tanto un estado emocional personal como el estado emocional de quienes lo rodean y ser capaz de gestionar estas emociones de manera efectiva.
- Inteligencia social: este tipo de inteligencia también se desarrolla a través de la experiencia. La inteligencia social depende de las habilidades lingüísticas y comunicativas, la comprensión de las reglas sociales y culturales, la capacidad de escuchar y la capacidad de gestionar las impresiones (la comprensión de la impresión que uno está causando en los demás).
- Book-smarts: Book-smarts, o inteligencia académica, se produce cuando se emplean habilidades como la resolución de problemas, la utilización de la lógica, la adaptación a nuevas situaciones y el razonamiento deductivo para realizar una tarea intelectual. La inteligencia de libros permite completar tareas académicas como equilibrar una chequera, resolver divisiones largas, escribir una carta o realizar una investigación.
- Inteligencia callejera: la inteligencia callejera, o inteligencia práctica, es más instintiva y está destinada a guiar al individuo de una manera que lo beneficie. Una persona que posee inteligencia callejera podría comprender la importancia de construir relaciones comunitarias, cómo negociar un trato, ajustar su comportamiento en presencia de diferentes empresas o tener una sólida conciencia de los riesgos potenciales en su entorno.
Inteligencia artificial
La Inteligencia Artificial, o IA, son los datos que las computadoras o máquinas utilizan para aprender y adaptarse a nuevas situaciones. Estos datos están destinados a imitar la inteligencia humana de la forma más natural posible para que las computadoras puedan agilizar tareas que, de otro modo, tardarían mucho más en completarse. Por ejemplo, la IA puede analizar rápidamente datos médicos, incluso en formas complejas, en cuestión de momentos. Esto es particularmente útil en la atención médica, ya que la IA también puede extraer datos significativos y organizarlos de manera que los médicos e investigadores puedan aplicar fácilmente dichos datos a prácticas futuras. La IA también se utiliza en industrias como la aplicación de la ley, la educación, la fabricación y el marketing.
Si bien la inteligencia artificial se ha vuelto muy competente en aprender de la experiencia, el concepto de generalizar el conocimiento sigue siendo un desafío de programación. Es decir, si bien la IA puede aprender de un error pasado o de un nuevo estímulo, no aplica tan bien ese conocimiento aprendido a un tema similar. Sin embargo, debido a que la IA se ha vuelto tan compleja, posee otras características de la inteligencia humana, como el razonamiento deductivo, la percepción, las habilidades lingüísticas y la capacidad de resolución de problemas.
Inteligencia vegetal y animal
Tanto la inteligencia vegetal como la animal dependen principalmente de los aportes de la naturaleza. Sin embargo, mientras los animales son conscientes de su entorno y de sí mismos, las plantas no tienen capacidades neurocéntricas, ya que no poseen cerebro. Dicho esto, hay muchas formas en las que la vida vegetal puede considerarse inteligente. Por ejemplo, los cactus de la región sur de Estados Unidos se han adaptado a climas cálidos y depredadores sedientos evolucionando su cuerpo interno para almacenar agua y el exterior para proteger ese preciado recurso con cientos de espinas afiladas. Lo que hace que las plantas sean inteligentes en lugar de simplemente adaptables es su capacidad para reconocer y anticipar las variaciones en su entorno.
Los animales, por el contrario, tienen una inteligencia más compleja. Al igual que los humanos, los animales recopilan información de su entorno o de un estímulo específico, retienen esa información y la reprocesan para alcanzar el objetivo universal de la supervivencia. Los animales emplean la inteligencia social al comprender los patrones de apareamiento, percibir amenazas y captar el comportamiento de otros animales que los rodean. En algunos casos, los animales pueden incluso utilizar el conocimiento que adquieren para manipular o engañar. Los zorros, por ejemplo, son conocidos por su astucia y se les ha observado frotando sus cuerpos con olor a puma para confundir a los depredadores.
Teorías de la inteligencia
Las teorías de la inteligencia han evolucionado a lo largo de muchos años para incorporar nueva información a medida que las personas aprenden sobre esta función compleja y multidimensional. Muchas de estas teorías consideran la inteligencia como un mapa mental que permite a las personas comprender cómo funciona el cerebro a nivel físico, mental y emocional. Dado que la inteligencia puede ser tanto concreta como abstracta, las teorías se forman mediante la aplicación psicométrica. Estas teorías siguen la fórmula de probar, medir y evaluar. Uno de los métodos de prueba más comunes para medir la inteligencia es la prueba del cociente intelectual o coeficiente intelectual. Esta prueba universalmente conocida se compuso utilizando muchas de las teorías destacadas sobre la inteligencia que se conocen y estudian en la actualidad.
Por ejemplo, Robert Sternberg desarrolló la teoría triárquica de la inteligencia, que se mide mediante tres conjuntos de habilidades: creativa, práctica y analítica. La base de esta teoría supone que las personas sólo son inteligentes si pueden establecer metas, aprovechar las fortalezas, compensar las debilidades y adaptarse a su entorno mediante la utilización de esas habilidades.
Al igual que Sternberg, el teórico Louis Thurston postuló que la inteligencia puede generalizarse en muchas facetas de la vida. Thurston, en desacuerdo con una de las teorías psicométricas anteriores desarrolladas por el psicólogo Charles Spearman, creía que la inteligencia se mide mediante siete habilidades diferentes (incluido el razonamiento, la verbal, la espacial y la memoria), en lugar de las dos que teorizó Spearman (factor general y mental). Spearman también creía que si un individuo obtiene una puntuación baja en una medida de inteligencia, obtendrá una puntuación baja en otras.
Resumen de la lección
La definición de inteligencia ha sido debatida entre los teóricos durante siglos. Hoy en día, la inteligencia puede definirse como la capacidad de recopilar, retener y utilizar conocimientos de una manera que genere un resultado deseado. Hay muchos tipos de inteligencia, que abarcan huéspedes multiespecies e incluso multidimensionales. La inteligencia artificial, por ejemplo, es una entidad no viva que es capaz de aprender y, por tanto, de intelecto. Por compleja que sea, la IA no recopila, retiene y utiliza conocimientos de la misma manera que lo hacen los humanos, las plantas y los animales. Los seres vivos tienen la ventaja de tener un cerebro con conexiones neurológicas que permiten que la inteligencia sea posible, eso a excepción de las plantas.
Lo que hace que la inteligencia sea un tema tan complejo es la cantidad de formas en que se mide. Los tipos de inteligencia, como la inteligencia social, emocional, académica y callejera, tienen sus propios méritos en sus respectivas situaciones. Si bien la inteligencia socioemocional es eficaz para construir relaciones y saber cuándo hablar por turno durante una conversación, tiene menos peso en una situación académica o de supervivencia. Una combinación de estos tipos de inteligencia es la razón por la que el intelecto se mide utilizando teorías prominentes que se han desarrollado durante cientos de años, como la teoría triárquica de la inteligencia, que mide la inteligencia a través de marcadores analíticos, prácticos y creativos, y la teoría de los siete factores. Teoría desarrollada por Louis Thurston. Hay muchas maneras en que uno puede ser considerado inteligente, y es a través de la medición, no de la comparación directa, como se obtiene un análisis correcto del intelecto.
Articulos relacionados
- Teoría de Bandas en Sólidos: Fundamentos y Aplicaciones
- Teoría de Repulsión de Pares Electrónicos de la Capa de Valencia (TRPECV)
- La Teoría 369 de Nikola Tesla: El Código Secreto del Universo
- Teoría del Catastrofismo: Una Mirada a la Evolución
- La Teoría de Aristóteles: Una Mirada Profunda a su Pensamiento Filosófico
- El BISSU en Biología: Definición, Orígenes y Teorías
- Teoría Contemporánea: Perspectivas y Enfoques en la Reflexión Actual
- ¿Cómo mejorar la Retención de Información?
- ¿Cómo puedo Mejorar mis Hábitos de Estudio?
- ¿Qué papel jugará la Inteligencia Artificial en la Clonación?