Historia, definición y caída de la República de Weimar

¿Qué fue la República de Weimar?

La República de Weimar fue el gobierno establecido en Alemania después del final de la Primera Guerra Mundial. A principios del siglo XX, Prusia, país alemán, había unido a muchos de los pueblos de habla alemana en un solo país, el Imperio Alemán. Sin embargo, debido a que el país perdió en la Primera Guerra Mundial y debido a sus acciones durante la guerra, los vencedores decidieron que querían disolver completamente este gobierno y que los alemanes crearan uno nuevo basado en principios democráticos.

La República de Weimar se define como el área que ocupaba el área alemana, menos algunas regiones que fueron entregadas a naciones limítrofes para debilitar a la nueva nación. Los objetivos de esta república eran restablecer el orden en Alemania, crear una tradición democrática en la región y reconstruir la economía del país. El período posterior al final de la Primera Guerra Mundial fue una época de caos en Alemania. El emperador alemán abandonó el trono y en la ciudad de Weimar se redactó una constitución que marcó el comienzo de la República Alemana.

Gobierno de la República de Weimar: Historia

El gobierno de la República de Weimar tenía una legislatura bicameral con una cámara elegida por los ciudadanos y otra con representantes designados por los estados alemanes. Esta república también tuvo un presidente y un canciller que dirigieron el país y compartieron muchos de los poderes que tiene el presidente estadounidense. Sin embargo, a diferencia de otros países, el nuevo presidente y la legislatura alemanes tuvieron que guiar al incipiente país a través de este período caótico y decidir cómo lograrían los objetivos de la República de Weimar a pesar del Tratado de Versalles.

El establecimiento de la República de Weimar

El 9 de noviembre de 1918, la República de Weimar fue anunciada como sucesora del Imperio Alemán después de que el emperador alemán abdicara del trono. Después de los primeros años de caos, los políticos alemanes lograron guiar a la República de Weimar hacia un breve período de prosperidad. Si bien el gobierno alemán originalmente no quería aprobar el Tratado de Versalles en 1919, los políticos reconocieron que era su única opción. En la segunda mitad de la década de 1920, el país lograba realizar pagos de reparaciones y hacer crecer la economía.

Algunas de las principales figuras políticas durante este período fueron:

• Frederich Ebert, presidente de 1919 a 1925
• Paul von Hindenburg, presidente de 1925 a 1934 y destacado general
• Philipp Scheidemann, canciller de Alemania en 1919, dimitió en protesta por el Tratado de Versalles.

La acción más importante que llevó a cabo el gobierno de Weimar fue la creación del Plan Dawes. Alemania comenzó a experimentar un período de hiperinflación después de que el gobierno decidió imprimir grandes cantidades de dinero para pagar las reparaciones de guerra. Esto provocó que la moneda alemana perdiera su valor. El Plan Dawes ralentizó los pagos de reparación y dio al país el espacio económico necesario para empezar a crecer de nuevo.

La República de Weimar durante la Gran Depresión

La República de Weimer fracasó en gran parte debido a la Gran Depresión y al Tratado de Versalles. Una vez que el mercado de valores de Wall Street colapsó y comenzó la Gran Depresión, el flujo internacional de dinero se vio interrumpido. Durante la Primera Guerra Mundial, Francia y Gran Bretaña habían pedido préstamos a los Estados Unidos para pagar el costo de la guerra. Además, en la década de 1920 Estados Unidos estaba prestando dinero a la República de Weimer para pagar sus reparaciones a Francia y Gran Bretaña. Estos pagos de reparación, a su vez, estaban siendo utilizados por Francia y Gran Bretaña para devolver el dinero que le debía a Estados Unidos. Este ciclo de dinero fue sostenible hasta la Gran Depresión, cuando ninguno de estos países tenía dinero de sobra y necesitaba usarlo para reactivar la economía interna.

Durante este período, el líder del Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (Nazi), Adolf Hitler, se postuló para convertirse en canciller de Alemania. Fue designado para el cargo de canciller porque su mensaje era convincente para muchos ciudadanos alemanes que sufrían el colapso económico. hitler dijo:

” El tratado se hizo para llevar a la muerte a veinte millones de alemanes y arruinar la nación alemana… ” – Hitler, 1923

Hitler llevaba muchos años difundiendo este mensaje; sin embargo, una vez que el desempleo se disparó y Francia y Gran Bretaña exigieron reembolsos, este mensaje resonó más que nunca. Así llegó a ser canciller de Alemania en 1933.

Caída de la República de Weimar

La caída de la República de Weimar se centra en el ascenso de Adolf Hitler. Una vez que llegó al poder en 1933 como canciller, Hitler logró convencer al gobierno alemán y a la mayoría del país de que la única manera de responder a la crisis económica era consolidar el poder en una sola persona, él. Varios otros países respondieron a la Gran Depresión de esta manera; sin embargo, para la República de Weimar, a los políticos les resultó difícil argumentar que el Tratado de Versalles era bueno para la economía alemana. Durante este período de depresión económica, el mensaje de Hitler convenció a tanta gente que en 1934 pudo declarar que el Partido Nazi era el único partido en Alemania. Lo hizo una vez que murió el presidente alemán Hindenburg, poniendo fin efectivamente a la República de Weimar.

Características del gobierno de la República de Weimar

El gobierno de la República de Weimar fue un intento genuino de los políticos alemanes de crear una nación democrática después de la Primera Guerra Mundial. Este gobierno tenía muchas características positivas. Sin embargo, existían varias debilidades que hicieron casi inevitable la destrucción de este gobierno.

Debilidades de la República de Weimar

Las debilidades de la República de Weimar en torno a la firma del Tratado de Versalles incluyen:

• Esta república democrática nunca estuvo unida detrás de una visión única del Tratado de Versalles, por lo que el gobierno fue susceptible a los líderes nacionalistas que pidieron la destrucción del acuerdo.
• La economía nunca iba a ser próspera durante décadas debido a los pagos de reparación.
• No existía ninguna tradición democrática en ninguna parte de Alemania, por lo que muchos alemanes no deseaban esta forma de gobierno. Después de ver cómo Bismarck logró llevar a Alemania a la prominencia mundial, se inclinaron a pensar que líderes poderosos podrían hacer más bien por el país.

Fortalezas de la República de Weimar

La República de Weimar también tenía varias fortalezas que, de no haber sido por la Gran Depresión, podrían haber permitido al gobierno tener éxito.

• Otorgó más libertades individuales que las que habían existido en el Imperio alemán.
• La república practicaba una democracia efectiva, que podría haber convencido a los ciudadanos alemanes de su valor.
• Pudo responder estratégicamente a los problemas económicos y reestructuró la moneda en la década de 1920 para ayudar a hacer crecer la economía.

La importancia de la caída del gobierno de la República de Weimar

Si bien el gobierno de la República de Weimar tenía varias fortalezas, Adolf Hitler pudo aprovechar las debilidades del país a su favor. La caída de la República de Weimar fue resultado directo de las duras medidas del Tratado de Versalles. Esto permitió a líderes nacionalistas como Hitler convencer a los alemanes de que la solución a sus problemas era militarizar y expandir Alemania una vez más.

El ascenso de la Alemania nazi probablemente podría haberse evitado si el Tratado de Versalles fuera menos severo; sin embargo, en ese momento los líderes de los países victoriosos querían asegurarse de que Alemania nunca más pudiera involucrarse en una guerra como la Primera Guerra Mundial. A pesar del éxito temporal de la República de Weimar, los objetivos tanto del Tratado de Versalles como del gobierno democrático fracasaron una vez que Hitler consolidó el poder y creó la Alemania nazi.

Resumen de la lección

La República de Weimar fue un gobierno alemán democrático que, en última instancia, resultó ineficaz debido a su abrumadora deuda de guerra y su inestabilidad política. El Tratado de Versalles exigía que Alemania pagara reparaciones de guerra y, a principios de la década de 1920, la República de Weimar comenzó a imprimir grandes cantidades de dinero para pagar su deuda. Sin embargo, esto hizo que la moneda perdiera su valor. El Plan Dawes reestructuró la moneda alemana y dio a la república el espacio que necesitaba para crecer económicamente antes de continuar con los pagos.

Estas operaciones continuaron hasta 1929, cuando el mercado de valores de Wall Street se desplomó, dando lugar a la Gran Depresión. Esto impulsó a los países extranjeros a dejar de prestar dinero a Alemania. Durante este período, Adolf Hitler pudo salir de la oscuridad política y convertirse en canciller de Alemania. Finalmente, pudo declarar que el Partido Nazi era el único partido en el país porque pudo convencer a suficientes alemanes de que revocaría el Tratado de Versalles. La mayoría de la gente estuvo de acuerdo en que el tratado era la causa fundamental de los problemas económicos de Alemania.