La chica sin manos: resumen y análisis

Los cuentos de hadas de Grimm

Muchos de los cuentos de hadas con los que estamos familiarizados hoy en día no eran tan felices y alegres originalmente. Uno de estos cuentos de hadas de los hermanos Grimm es “La chica sin manos”. Basándonos solo en el nombre, sabemos que esta no será una historia muy feliz.

Esta historia comienza con un padre que fue engañado para que hiciera un trato con el diablo. El diablo engaña al padre para que le venda a su hija (el hombre pensó que solo estaba intercambiando un árbol, no su hija) a cambio de hacerse rico. Pero termina que la hija es tan buena, pura y piadosa que el diablo no puede llevarse a la niña ya que las lágrimas que llora le lavan las manos. El diablo incluso consigue que el padre le corte las manos a su hija, con la esperanza de que el diablo pueda llevarse a la niña, pero no funciona porque ella llora tanto que sus colillas están limpias.

Un ángel ayuda a la niña a conseguir comida.

Así que ahora la niña no tiene manos y se va sola al mundo. Su bondad pronto es reconocida por un rey que acaba casándose con ella. Mientras el rey está en guerra, la niña sin manos tiene un hijo. El diablo, todavía molesto por no poder llevarse a la niña, termina cambiando de letras para que parezca que el rey le dijo a su madre que matara a la niña y a su hijo. La madre del rey se niega a hacer un acto tan horrible; en cambio, los despide por temor a lo que hará el rey cuando regrese. Está protegida por Dios y un ángel acaba alojándola y reparando sus manos “por la gracia de Dios y su propia piedad”.

Cuando el rey regresa, se entristece mucho al enterarse de lo sucedido (y también se confunde con la carta). Termina buscando a su hija y a su hijo durante siete años. Finalmente los encuentra. Al principio, su hijo, a quien la niña llama “Lleno de dolor”, se niega a reconocerlo como padre, porque solo le han enseñado que Dios es su padre. Finalmente todo está explicado y todos viven felices para siempre.