Orden de los Asesinos: Historia y líderes

Orden de Asesinos

La Orden de los Asesinos fue una organización que llevó a cabo asesinatos en el Oriente Medio medieval. Este grupo recibió su nombre en honor a su fundador, Hasan-i Sabbah, aunque algunos han argumentado que en realidad recibió su nombre del hachís, una droga que fumaban los Asesinos. Era la rama armada de la secta del ismailismo nizarí en el Islam. Hasan y sus seguidores comenzaron a tomar el control de los castillos en 1090 d. C. Para competir en el caótico entorno político del Oriente Medio medieval, Hasan desplegó a sus Asesinos para matar a sus rivales; los Asesinos no se enfrentaban a sus objetivos de frente, sino que apuntaban a asesinarlos cuando eran vulnerables.

¿Quiénes eran los ismailitas nizaríes?

Durante sus primeros siglos, el Islam estuvo fragmentado en varias sectas religiosas rivales que buscaban controlar el mundo musulmán. Una de ellas era el Islam chiita, que sostenía que los descendientes y parientes del profeta Mahoma debían ser los líderes del Islam.

El Islam chiita, a su vez, se dividió entre varios grupos en función de los detalles sobre quién debía dirigir la fe como imán. La secta ismailita fue forjada por aquellos que creían que uno de esos nobles, Ismail ibn Jafar, era el legítimo imán del Islam. La división más grande del Islam ismailita es a su vez la secta nizarí, que enfatiza la racionalidad y el razonamiento. La secta nizarí se originó en una disputa de herencia: el ismailismo nizarí sostenía que un noble llamado Nizar era el legítimo califa del Islam y del califato fatimí de Egipto; fue capturado y asesinado por sus enemigos en 1095.

Tras el asesinato de Nizar, sus partidarios huyeron de Egipto y tomaron el castillo de Alamut, hoy situado en Irán, donde forjaron su propio Estado.

¿Qué pasó con los asesinos?

La Orden de los Asesinos tuvo éxito en sus campañas contra las fuerzas turco-persas, los estados árabes de Oriente Medio y los cruzados cristianos. Sin embargo, en 1253 se enfrentó a un nuevo enemigo: el Imperio mongol. A mediados del siglo XIII, la Orden de los Asesinos comenzó a enfrentarse al Imperio mongol, que invadió Persia y destruyó el imperio local.

La guerra entre el estado nizarí y el Imperio mongol comenzó en 1253. Las fuerzas mongoles bajo el mando de Hulegu atacaron las fortalezas nizaríes utilizando máquinas de guerra y capturaron castillos clave. Cuando la guerra empezó a ir mal, el imán Muhammad III fue asesinado en 1255 y reemplazado por su hijo, el imán Rukn al-Din Khurshah. Sin embargo, la Orden de los Asesinos perdió la guerra; el Imperio mongol tomó el control de la fortaleza de Alamut, quemó su inestimable biblioteca y mató a Rukn al-Din Khurshah.

Esto debilitó profundamente a la Orden de los Asesinos, pero el grupo sobrevivió a la ocupación mongola. En 1275, el grupo recuperó el control de la fortaleza de Alamut bajo el liderazgo del hijo de Rukn, el imán Shams al-Din Muhammad. Sin embargo, las fuerzas mongolas retomaron Alamut en 1282. Cuando Shams murió en 1310, la comunidad ismailita nizarí estaba dividida sobre quién debería sucederlo como imán. A fines del siglo XIV, la Orden de los Asesinos perdió protagonismo en la política de poder de Oriente Medio.

Sin embargo, el ismailismo nizarí sigue siendo una secta importante en el Islam hasta el día de hoy. El líder actual de la secta es Aga Khan IV, que es el 49.º imán y vive en Portugal.

Resumen de la lección

La Orden de los Asesinos fue una organización que llevó a cabo muchos asesinatos en el Oriente Medio medieval. Fue fundada por Hasan-i Sabbah, un noble musulmán que controlaba el castillo de Alamut en Persia en 1190. En particular, la Orden de los Asesinos era la rama armada del ismailismo nizarí, una secta del Islam que competía por la influencia en el mundo musulmán.

A lo largo de los siglos XII y XIII, la Orden de los Asesinos mató a muchos líderes cruzados musulmanes y cristianos, incluidos tres califas y un rey de Jerusalén. Sin embargo, el grupo perdió el control del castillo de Alamut en 1256 ante el invasor Imperio mongol. Si bien lo recuperó brevemente en 1275, lo volvió a perder; por lo tanto, la Orden de los Asesinos se desvaneció como fuerza política. Sin embargo, el Islam ismailita nizarí continúa existiendo hoy en día; el imán actual de la secta es Aga Khan IV.