¿Por qué se considera el “Grito de Dolores” como el inicio de la Independencia?

Publicado el 2 diciembre, 2024 por Rodrigo Ricardo

El “Grito de Dolores” el inicio de la Independencia de México

El “Grito de Dolores”, pronunciado el 16 de septiembre de 1810 por el padre Miguel Hidalgo y Costilla en la localidad de Dolores, Guanajuato, es considerado el punto de partida de la lucha por la independencia de México. Este acontecimiento, que marcó el inicio de una serie de eventos históricos que duraron más de una década, no solo simboliza el comienzo de la lucha por la autonomía de México frente a España, sino que también es el primer acto concreto de un movimiento que buscaba acabar con el dominio colonial español y establecer una nación libre.

El contexto histórico de la época

Para entender por qué el Grito de Dolores es considerado el inicio de la independencia de México, es necesario analizar el contexto social, político y económico en el que ocurrió. A finales del siglo XVIII y principios del XIX, el Virreinato de la Nueva España experimentaba una serie de tensiones y desigualdades profundas, que propiciaron un ambiente de descontento generalizado entre diversos sectores de la sociedad.

  • Desigualdades sociales: En la sociedad colonial, había una rígida jerarquía en la que los españoles y criollos (hijos de españoles nacidos en América) ocupaban los puestos de poder, mientras que los indígenas y mestizos vivían en condiciones de explotación y marginación. Esta estructura social desigual alimentó la frustración de aquellos que eran oprimidos y excluidos.
  • Crisis económica: El agotamiento de los recursos naturales, el alto costo de la guerra en Europa y las políticas económicas de la monarquía española afectaron negativamente a la economía del Virreinato. La carga fiscal sobre la población, en especial sobre los grupos más vulnerables, fue un factor de gran descontento.
  • Ideas ilustradas: Las ideas de la Ilustración europea, que promovían conceptos de libertad, igualdad y fraternidad, llegaron a las colonias americanas y comenzaron a influir en los criollos y otros sectores de la sociedad. La Revolución Francesa (1789) y la independencia de las Trece Colonias Americanas (1776) sirvieron como ejemplos e inspiraron a los movimientos revolucionarios en América Latina.

El papel de Miguel Hidalgo y la conspiración de Querétaro

Miguel Hidalgo y Costilla, un sacerdote criollo, fue uno de los principales líderes del movimiento insurgente que comenzó a gestarse en los años previos al Grito de Dolores. Hidalgo no solo era un hombre de fe, sino también un intelectual que había estudiado las ideas reformistas y liberales de la época. Aunque inicialmente fue un sacerdote devoto, comenzó a sentir una creciente indignación por las condiciones sociales y económicas de las clases más desfavorecidas.

En 1810, Hidalgo se unió a un grupo de conspiradores criollos en la ciudad de Querétaro, que incluía a personajes como Ignacio Allende, Juan Aldama y José Mariano Abasolo, entre otros. Este grupo, conocido como la Conspiración de Querétaro, planeaba un levantamiento contra el dominio español. Su objetivo era acabar con el yugo colonial y establecer un gobierno independiente.

Sin embargo, las autoridades coloniales descubrieron la conspiración antes de que pudiera ejecutarse. A raíz de la delación de una de las conspiradoras, Marta Rodríguez, la noticia de la conspiración se filtró, y los líderes insurgentes fueron obligados a adelantar el inicio de la rebelión.

El “Grito de Dolores”

La madrugada del 16 de septiembre de 1810, Miguel Hidalgo, al enterarse de la detección de la conspiración, decidió lanzar el levantamiento contra el dominio español. En ese momento, se encontraba en el pueblo de Dolores (hoy Dolores Hidalgo, Guanajuato), donde era el párroco. Con una mezcla de convicción y urgencia, Hidalgo tocó las campanas de la iglesia y convocó a la población a unirse a la causa de la independencia.

Según la tradición, el Grito de Dolores fue un llamado a la lucha, en el que Hidalgo expresó su deseo de acabar con el abuso de la monarquía española y liberar a los mexicanos del yugo colonial. Aunque el discurso exacto de Hidalgo no está completamente claro, se sabe que instó a los habitantes a levantarse contra los “malditos gachupines” (término despectivo para los españoles peninsulares) y a luchar por la libertad y la justicia.

En palabras de Hidalgo, el Grito de Dolores fue algo así:

“¡Viva la Virgen de Guadalupe! ¡Viva la América libre! ¡Muera el mal gobierno! ¡Muera la tiranía!”

Este acto simbólico fue el primer paso hacia una rebelión que se extendió rápidamente por todo el país. Hidalgo, acompañado de miles de indígenas y campesinos, marchó hacia las ciudades de San Miguel el Grande (hoy San Miguel de Allende) y Querétaro, y la rebelión pronto tomó fuerza. Con el llamado de Hidalgo, se movilizó a un gran número de personas que, al principio, se unieron a la causa sin un plan estratégico claro, pero con el fervor de la lucha por la libertad.

La importancia del Grito de Dolores como inicio de la independencia

El Grito de Dolores es considerado el inicio de la independencia de México por varias razones:

  1. El primer acto abierto de rebelión: Aunque había habido intentos de conspiración en el pasado, el Grito de Dolores fue el primer acto abierto de lucha armada contra el gobierno español. Representó el momento en que la lucha por la independencia pasó de la clandestinidad a la acción directa.
  2. La convocatoria popular: Mientras que otros movimientos separatistas eran liderados por criollos e intelectuales, el Grito de Dolores apeló a las masas, especialmente a los indígenas y mestizos. Esto permitió que la rebelión se expandiera rápidamente a lo largo de Nueva España, involucrando a sectores sociales que históricamente habían sido marginados.
  3. El simbolismo de la Virgen de Guadalupe: La mención de la Virgen de Guadalupe en el Grito de Dolores fue crucial. La imagen de la Virgen era ya un símbolo de identidad y resistencia para muchos mexicanos, especialmente entre los pueblos indígenas. Hidalgo, al invocar a la Virgen, unificó a diversas comunidades bajo un símbolo común, lo que ayudó a consolidar la causa insurgente.
  4. El rechazo al sistema colonial: El Grito de Dolores representó un rechazo claro al sistema de opresión colonial impuesto por la corona española. Hidalgo no solo luchaba por la independencia de México, sino también por la igualdad social y la justicia para los sectores más oprimidos de la sociedad.
  5. El comienzo de un proceso largo y complejo: Aunque la lucha por la independencia no terminó con el Grito de Dolores y el proceso de emancipación fue largo y lleno de dificultades, este acto fue el primer paso en un conflicto que culminaría en la independencia de México en 1821, después de 11 años de luchas, sacrificios y transformaciones sociales y políticas.

Conclusión

El Grito de Dolores es considerado el inicio de la independencia de México porque marcó el comienzo de un proceso de liberación que rompió con la estructura colonial y desafió el poder de la monarquía española. Este evento simbolizó el despertar de la nación mexicana y el deseo de libertad, igualdad y justicia para todos sus habitantes. Cada 16 de septiembre, en conmemoración de este momento histórico, México celebra su Día de la Independencia, un recordatorio del valor y sacrificio de aquellos que lucharon por la autonomía del país.

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