Factores que favorecen el pago de dividendos elevados

Dividendos

Jeannie dirige una empresa que comenzó a vender acciones a inversores el año pasado. Ahora, la empresa está obteniendo beneficios y Jeannie (junto con el consejo de administración) ha decidido darles a los accionistas un dividendo o un pago a los accionistas con los beneficios de una empresa. Los dividendos pueden tener muchas formas: efectivo, más acciones o incluso un regalo físico. Pero la empresa de Jeannie, como la mayoría de las empresas, ha decidido repartir dividendos en efectivo. Es decir, los accionistas recibirán un cheque según la cantidad de acciones que posean.

Pero todavía hay una gran decisión por tomar: ¿cuánto deberían ser los dividendos? La empresa tiene una ganancia bastante grande, por lo que pueden dar un gran dividendo en efectivo a sus inversores o pueden dar un dividendo en efectivo menor y reinvertir el resto de las ganancias en la empresa. ¿Que deberían hacer?

Para entender por qué podría ser beneficioso para la empresa de Jeannie dar un gran dividendo, veamos las razones por las que un pago de dividendos alto es beneficioso desde dos perspectivas: la de los inversores institucionales y la de los inversores individuales.

Inversores individuales

La amiga de Jeannie, May, es una inversora individual. Ella es solo una persona y ha comprado acciones de la compañía de Jeannie como parte de sus ahorros. Obtendrá un dividendo cuando la empresa de Jeannie pague y espera un dividendo alto. Para entender por qué May quiere un dividendo alto, primero tenemos que discutir por qué alguien querría un dividendo bajo. Después de todo, más dinero es bueno, ¿verdad?

No tan rapido. Jeannie también tiene acciones de su empresa y espera un pago de dividendos bajo. Eso es porque Jeannie es una fuente de ingresos altos y realmente no necesita el efectivo en este momento. Si recibe un pago de dividendos alto, significa que los dividendos se gravarán a un nivel muy alto porque ella gana mucho. Es mejor para ella si la empresa reinvierte el dinero en la empresa y paga muy poco.

Pero May no es como Jeannie. Está jubilada y tiene ingresos fijos. Su nivel de impuestos es muy bajo, por lo que a May no le preocupa que se graven demasiado el dinero. Además, a May realmente le vendría bien el dinero, ya que no recibe grandes ingresos. Por lo tanto, personas como May, que están en una categoría impositiva baja y necesitan el dinero, prefieren un pago de dividendos alto.

Inversores institucionales

Sin embargo, las personas no son las únicas que invierten en empresas como la de Jeannie. Las corporaciones y las organizaciones exentas de impuestos (como las empresas sin fines de lucro) también pueden comprar acciones y también recibir dividendos. Por lo general, quieren un pago de dividendos alto, aunque a veces por razones ligeramente diferentes a las de los inversores individuales.

Al igual que los inversores individuales, las instituciones pueden querer un pago de dividendos alto debido a los bajos impuestos. Las corporaciones, por ejemplo, tienen una exclusión imponible de un cierto porcentaje de los dividendos recibidos de otras compañías. La empresa de Jeannie puede comprar acciones de otras corporaciones y no tener que pagar impuestos sobre el 70% de los dividendos que reciben. ¡Y el porcentaje puede ser incluso mayor para algunos inversores institucionales! Asimismo, las instituciones exentas de impuestos no tienen que preocuparse por los impuestos a los dividendos. Entonces, al igual que May y otros inversionistas individuales, muchas instituciones favorecen un pago de dividendos alto porque no les preocupan los impuestos que pagan sobre los dividendos.

Sin embargo, existe un incentivo adicional para que los inversores institucionales quieran un pago de dividendos alto. Es decir, esas instituciones tienen la obligación fiduciaria de invertir su dinero de manera inteligente. Un pago alto de dividendos es una forma de cumplir con esa obligación; es decir, muestra que la institución está invirtiendo sabiamente.

Resumen de la lección

Un dividendo es un pago a los accionistas de las ganancias de una empresa. Hay muchas razones por las que los pagos de dividendos elevados pueden resultar ventajosos para las personas y las instituciones. En general, los inversores individuales que se encuentran en una categoría impositiva baja y necesitan efectivo favorecerán los pagos de dividendos elevados. Debido a las exenciones fiscales, los inversores institucionales (como empresas y organizaciones exentas de impuestos) también suelen preferir dividendos elevados. Además, los inversores institucionales a menudo tienen la obligación de invertir con prudencia, y un pago de dividendos elevado demuestra responsabilidad fiduciaria.